1. Dormir con las lentillas, cuando estas no son adecuadas para ese uso
Por pereza, despiste o desconocimiento, hay personas que no se quitan las lentillas al irse a dormir.
El ojo necesita su momento de relax, por lo que hay quitarse las lentillas para ofrecérselo.
Además las lentillas necesitan una limpieza diaria cada vez que se han usado. El no realizar esta limpieza puede originar una infección.
Si durante la época estival no llevamos a cabo una serie de cuidados básicos de los ojos de nuestros hijos, pueden sufrir importantes lesiones.
La radiación solar está compuesta por ondas visibles e invisibles, mientras las primeras solo resultan dañinas si nos exponemos muy intensamente a ellas, las segundas se componen de radiaciones infrarrojas y rayos ultravioletas (UVA), que son los más nocivos para el ojo.
Los Ojos son un 20% más sensible que la piel a la influencia de los rayos solares, el uso de gorras con visera y gafas de sol reduce en un 20% lo problemas oculares ocasionados por el sol.
Este problema surge cuando los ojos no son capaces de trabajar de forma sincronizada.
El ser humano tiene la capacidad de ver todo aquello que le rodea en 3 dimensiones. Para que esto sea así es necesario que los ojos actúen de forma sincronizada, algo que es posible cuando tienen la misma visión y pueden enfocar. Esto se consigue gracias a la acción de los seis músculos que mueven cada ojo. Si este proceso se realiza correctamente tendremos una buena visión binocular.
¿Qué es?
El orzuelo es una pequeña infección que supura y que aparece en el borde del párpado. Suele generarse por una infección en la raíz de la pestaña (folículo) y puede aparecer en la parte externa del parpado o en la parte interna del ojo como un grano rojo, pequeño y aislado en el párpado.
Síntomas
Los más frecuentes son, dolor, enrojecimiento e hinchazón del párpado, lagrimeo y formación de costras alrededor del ojo.
